
Diciembre es una época particular, quizás un poco revolucionada para algunos, de cierres, encuentros, balances, de reflexiones, recuerdos y nostalgia donde muchas veces la sensibilidad está a flor de piel, culturalmente está asociada a la alegría, a la familia, a la unión y celebración, pero también hay mucha ansiedad por cumplir con todo 🤯 o llegar a terminar lo que nos propusimos a principios de año y poco espacio a sentir el resto del abanico de emociones.
Quizás te guste seguir algunas tradiciones o rituales, quizás creaste nuevas y soltaste algunas viejas costumbres, o quizás es un día más donde decidís vivir mas tranquila y no subirte a la ola de locura.
Desde vestirte de rojo, elegir regalos para las personas que amas, hacer despedidas, amigos invisibles, tomarte vacaciones, cocinar comidas típicas, armar el arbolito y decorar tu casa, recordar a quienes ya no están, honrar lo vivido, lo que no fue o intencionar lo que está por venir o queremos mejorar, agradecer, celebrar con amigos o familia, en pareja, solo, o con tus mascotas, compartir, abrazar, disfrazarte y armar la carta para papa Noel con los más pequeños 🎁. Quizás también sea tu momento de estar mas tranquila y conectar con las necesidades que vayan apareciendo dejándolas fluir.🍀
Particularmente siento que las fechas donde hay cierta expectativa o se debe hacer algo genera un poco de tensión o presión y eso no me deja fluir del todo, quería dejar mi granito de arena, ya que muchas veces me ayudó que otra perspectiva habilite de cierta manera lo que siento y deseo para atravesar lo que tengamos que atravesar con más soltura, esta es una invitación a descontracturar y habilitar aún más la libertad de pasar las fiestas como deseemos con autenticidad y podamos crear nuestras propias estructuras flexibles en paz, con amor y sin culpa.
Gracias 2024 por todo lo vivido y sentido, brindo por un gran 2025 🥂